¿Estás listo para abordar el tren?

Por Yeismarie Vélez

Así como un tren tiene sus paradas Dios las hace en nuestra vida. Cada estación representa una etapa de nuestra vida, en ocasiones nos montamos en el tren y en otras lo dejamos ir. Al final el tren llega a su destino, pero también observamos que eso toma algo de tiempo. Tal vez si dejamos ir el tren porque se nos olvidó o nos distraímos, el regresa nuevamente en otra ocasión y abre sus puertas para que podamos entrar. Dios funciona de la misma manera; Él es el tren. Nos acompaña en todas nuestras estaciones, en ocasiones dejamos que el opere, pero en otras somos tercos y lo dejamos ir así que tenemos que esperar a que nos dé la siguiente oportunidad para montarnos.

Esto no significa que nos dejó sin dirijirnos, sino que nos enseña a que debemos ser guiados en todo momento por Él. Nos enseña el valor tan preciado que es el que nos abra sus puertas para transportarnos al siguiente nivel, pero que depende de nosotros si entramos o lo dejamos. Si nos distraemos también puede afectarnos, pero sabes, Él siempre regresa por nosotros. No importa las veces que tenga que volver a la misma estación Dios lo hará por amor a sus hijos, así que no tengas temor o vergüenza por volver a entrar en su deleite y amor pues Él mira nuestro corazón y nuestra mente. Dios te bendiga.