Muévete a buscar otro queso...

Por Michelle Vélez

Mi profesora de maestría recomendó leer un cuento llamado ¿Quién ha movido mi queso? me pareció muy raro en leer un libro con este tema pues ya estamos en maestría como rayos íbamos a leer un cuento de niño pequeño. Sin embargo, el cuento se convirtió en poco segundo el favorito de mi noche, para darle un resumen el cuento trataba de cuatro personajes dos de ellos llenos de energía para recorrer los laberintos buscando las centrales queseras y los otros dos que se conformaban con tener siempre el queso a la mano y justo al lado de la central quesera. Bueno para hacer el cuento más corto resulta que un día en la central quesera dos de estos personajes se dieron cuenta que no había queso disponible ya para ellos en cambio los otros dos personajes cuanto se dieron cuenta que en esta central ya no quedaban quesos para ellos rápido pusieron en marcha su plan ir en busca de otra central para obtener más queso. Uno de estos personajes que se había confirmado con no tener más queso un día quiso salir de su zona de confort y ir por los laberintos para ir en busca de una central quesera. Al fin al cabo este gran personaje llamado Kif llegó a esta central que está llena de queso mientras que su compañero aún no sabemos qué hizo con su vida.

Ahora bien, que quiero decirte con esta historia que te acabo de contar, que así mismo es nuestra vida en la fe. A veces Dios nos mueve el queso para que nosotros podamos movernos a su propósito en nuestra vida, pero estamos tan felices y tan cómodos en nuestra zona de confort que nos sentamos a esperar que Dios nos traiga más queso. En cambio, Dios quiere que camines por ese laberinto (vida) que está llena de retos, metas, miedos y muchas cosas más, pero llena de grandes aventuras, bendiciones para tu vida. Es hora de hacer como nuestro amigo Kif que, aunque estes lleno de miedo se lanzó en busca de una central quesera nueva para probar nuevos quesos. No te digo que encontró rápido esta central, sino que le llevó mucho tiempo para encontrarla y disfrutar de una vida plena. Dios quiere darte nuevos quesos (bendiciones y promesas) a tu vida, pero debes moverte por ese laberinto y confiar en que Dios está contigo y tiene el control de todo en tu vida. Confía en el proceso que cada etapa te lleva a una central nueva para poder aprender más sobre cuál es tu propósito y llamado en tu vida.

¡Dios te bendiga mucho!