Tema: Echa fuera lo que no es de Dios.

Por. Jan C. Fernández

Números 33:50,55

"Y habló Jehová a Moisés en los campos de Moab junto al Jordán frente a Jericó, diciendo: Si no echareis a los moradores del país de delante de vosotros, sucederá que los que dejareis de ellos serán por aguijones en vuestros ojos y por espinas en vuestros costados, y os afligirán sobre la tierra en que vosotros habitareis."

En el pacto antes de Cristo, Dios guío a Israel por la tierra prometida y le dio instrucciones de lo que debían hacer para vivir en ella. Esta tierra estaba poseída por gente que no amaba a Dios y eran enemigos de su pueblo. Sin embargo, Israel muchas veces no logró sacar a sus enemigos por actos de desobediencia o por dejar incompleta las tareas que Dios les asignó. Esto lo podemos trasladar al nuevo pacto en el que vivimos. Si no sacamos fuera a los enemigos de nuestros corazones, es decir: el orgullo, rencor, malos hábitos, vergüenza, autosuficiencia y la baja autoestima, entonces estas cosas nos afligirán el alma.

Es necesario que aprendamos a derrotar la maldad con el bien de Dios y no devolver el mal. Así como el Señor quería llenar la tierra con personas que tuvieran un corazón alineado con el de Él, nosotros debemos llenar nuestra mente y espacio con su presencia. Conquista lo que Dios te ha puesto por delante, arrebátale al enemigo las almas de tu familia y amigos, ora, no participes de las malas conversaciones y corrige tus malas acciones para que le cortes las oportunidades al enemigo de sacarte los ojos.

Dios te bendiga.