Tema: No dejes que el enemigo te desanime

Por Jan Carlos Fernández

Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.

Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.

Mateo 4:1-2

Jesús ayunó los 40 días y fue tentado por el diablo. A veces pensamos que luego de tener intimidad con Dios o de hacer cosas para Dios, lo que vamos a ver rápido sob recompensas de parte del cielo. Sin embargo, podemos ver que el mismo Jesús lo que recibió fue un ataque del mismo diablo y cuando venció la tentación, entonces llegaron los ángeles y le sirvieron. Puede que respuesta del Señor no la veamos hasta que terminemos la prueba, pero Él siempre está ahí. Los ángeles le sirvieron, luego de que venció, pero ya estaban rodeando a Jesús en su caminar.

Santiago 4:7-8

Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

Dios ya escuchó nuestro clamor, porque Él se acerca a nosotros, pero nos desarrollamos como guerreros de fe cuando no vemos su respuesta inmediata.

Hay momentos en los cuales veremos la mano del Señor instantáneamente, pero van a haber procesos que se tardarán en mostrar la luz al final del tunel, pero Dios está sosteniéndonos en el trayecto. Jesús soportó la tortura de la cruz, porque Dios estaba ahí con Él y al culminar la obra le resucitó. Así el Señor, nos dará la victoria aún sobre lo que parece imposible de vencer y veremos el milagro surgir. Cuando todo parece estar perdido debemos seguir creyendo porque para Dios no hay nada difícil e imposible y Él habita en nosotros, por lo que tenemos acceso a su poder, pero se necesita fe. La fe se desarrolla en el desierto, donde la presencia del Señor parece estar ausente. Ese es el momento de seguir el ejemplo de Jesús y declarar la palabra, recordándole al enemigo que nuestro Dios es más grande que él. Esto es necesario para atravesar el desierto y finalmente ver la recompensa.