Un Juego Con Dedicación...

Por. Yeismarie Velez

Estaba en un juego muy importante, esa vez no quería perder ese gran premio. Luché hasta el final, sin rendirme un solo instante, pero no logré ganar el primer lugar. Me recuerdo que ocurrió algo extraño, el líder del equipo contrario, quien sostenía el trofeo se acercó a mí con mucha emoción. Este me dijo "ten tu trofeo, te lo mereces" muy sorprendido le pregunté el porque me lo daba si había perdido, había quedado en segundo lugar. Este me repondió de una forma que jamás esperé, "amigo más que nadie te mereces este trofeo, porque un premio no se trata de quien lo hizo mejor, sino de lo mucho que te esforzaste hasta el final, de levantarte y seguir adelante sin importarte que estabas perdiendo todo el juego, se trata de que aprendias de tus errores y intentabas mejorar cada segundo para lograr ganar."

De esto se trata la vida, Dios no quiere que ganes el primer lugar, el quiere que des lo mejor de ti sin importar la situación, de luchar con todas tus fuerzas hasta el final. Al igual que este niño vio el esfuerzo y la dedicación de su compañero, así Dios nos ve cada día y al final nos da lo que tanto anhelamos en la vida. No importa si pierdes en la camino un millón de cosas, lo importante es cuanto luchaste y cuanto aprendiste de esto. Recuerda siempre que Dios tiene un propósito con cada cosa y que a veces se tiene que cerrar una puerta, para aprender de eso y así cuando se abra la verdadera no cometas los errores de antes y estes más firme que nunca.

¡Dios te bendiga!